Acción de Cumplimiento para el Macroproyecto San José

 


Por: Gonzalo Duque-Escobar*

Portada: Barrios de la Comuna San José. Salgero C. (2013)

Permítanme como Docente de la Universidad Nacional de Colombia y Miembro de la Sociedad de Mejoras Públicas de Manizales, referirme en este recinto de la democracia, a un asunto más que importante, fundamental y necesario para la Ciudad, para el cual la falta de compromiso político ý ciudadano ha sido la gran constante, apoyando la Acción de Cumplimiento presentada por Germán Vallejo Obando y Álvaro Salazar Marín, en el caso del Macroproyecto San José, y admitida por el Juzgado Segundo Administrativo de Caldas según folio AI. 035 fechado el 25-01-2022, en contra del Municipio de Manizales y la ERUM, bajo el argumento de que a la fecha, ni el alcalde de Manizales ni dicha empresa, han dado cumplimiento a lo consagrado en la Constitución Nacional de 1991, en materia de Participación y de Consulta Ciudadana, un asunto que exige el control político del Consejo de Manizales soportado en el conocimiento a fondo de los documentos técnicos para la intervención de la Comuna San José.

Derechos constitucionales y Sectores estratégicos.

Imagen 01: Ladera del Olivares en la Comuna San José ( Agencia de Noticias UN ) y Plaza de Mercado en Manizales ( La Patria).

Si Colombia se ha definido en la carta como un estado Social de Derecho, es porque nuestra normatividad garantiza derechos fundamentales como la vida, la convivencia, la justicia y la igualdad, entre otros, actuando dentro de un marco jurídico, democrático y participativo. De ahí la importancia de cumplir la Ley 388 de 1997, en su Artículo 4 sobre Participación Democrática, por parte del Municipio de Manizales, pero esto en el conflicto de la Comuna San José, con el trámite del Macroproyecto de Renovación Urbana, históricamente no ha ocurrido dado el incumplimiento de normas con fuerza de Ley en el desarrollo de Actos Administrativos. Aún más, dado que se trata de una renovación urbana en un territorio, la pregunta es cómo aplicar un instrumento para el mejoramiento físico, social y ambiental de un fragmento de unas 100 hectáreas, vecino al Centro Histórico de Manizales, pero sin violar la autonomía territorial de dicha Comuna y el derecho a la consulta de sus actores sociales.

Si se entiende la Concertación como un deber y derecho en la democracia, el tema de San José debió partir de una convocatoria clara, con actores sociales representativos que nutran de información la compleja temática socioambiental de dicho territorio, en el cual sobresalen: 1- sectores con problemáticas como el riesgo severo a deslizamientos que enfrentan unas mil viviendas establecidas sobre la frágil Ladera del Olivares, asunto que de haberse considerado en un plan parcial demandaría una inversión de 100 mil millones de pesos (a razón de cien millones de pesos por vivienda); y 2- la comunidad del Sector de la Galería donde reunidos en un mismo espacio insuficiente convergen hacinados, tanto minoristas indefensos, como mayoristas en posición dominante, sin que se haya considerado solución alguna, ya que Manizales no cuenta con una central de abastos (un mercado de mercados).

Falta voluntad política.


Imagen 02: Avenida Marcelino Palacio (ERUM) y Apartamentos al 2020 en San José (La Patria).

Pero aquí el asunto es que, para avanzar en un análisis participativo mediado por la inclusión, y encontrar la justa negociación en torno a la compleja problemática de La Comuna San José, si el proceso de Concertación no se ha dado, entonces categóricamente podría afirmarse que existe el enorme riesgo de concebir y ejecutar obras inconsultas en el lugar ya que, sin información necesaria y suficiente, al no poderse generar ningún análisis el Municipio terminará improvisando. Ahora, entendiendo el territorio como una construcción social e histórica, e igualmente siendo cualquier conflicto social un hecho constante en las representaciones de su propia historia, la participación ciudadana como proceso que puede expresarse, debe tener como formas las fases de información, consulta y concertación, amparadas en procesos sociales rigurosos y estandarizados.

Finalmente, para ilustrar la complejidad de la problemática de la Comuna San José de Manizales, permítanme una radiografía:

1-   En octubre de 2019 cuando se realizó un Cabildo Abierto con motivo de los diez años del Macroproyecto San José por la propia comunidad y al cual se invitó la Alcaldía: la principal conclusión fue que, a pesar de haber pasado tres administraciones, cada una aportó paliativos pero no soluciones de fondo a problemáticas estructurales que exigen un desarrollo integral y a largo plazo.

2-   Al constatar la ausencia del gobierno municipal en el citado evento de 2019, era evidente la falta de voluntad política en la ciudad, para resolver una deuda histórica de un modelo equivocado de ocupación del territorio, para el cual se han planteado soluciones que desconocen realidades como la de la Galería y la ladera del Olivares, y donde la renovación urbana, explica además de violación de derechos fundamentales, unos diez mil desplazados.

Epílogo.

En esta compleja problemática de Manizales, relacionada con los múltiples impactos de un proyecto de renovación urbana, para el cual el gobierno nacional ha aportado cerca del 10% de los recursos proyectados y que, por desconocer la normativas de la ley colombiana sobre la materia, continúa concebido como un desarrollo inmobiliario donde la especulación con la privatización de la plusvalía urbana acumulada explica un balance social que cruza por el desplazamiento de 10 mil de los 25 mil habitantes de la comuna, para no repetir la historia de la Renovación Urbana de 1992 en la Baja Suiza, además de fortalecerse la civilidad como valor supremo de la cultura urbana, y los valores éticos como estructurantes fundamentales del proyecto, urge implementar acciones integrales dentro de un plan de acción participativo que, partiendo de un pacto de la sociedad manizalita con la Comuna San José, sirvan de soporte para articular los proyectos estratégicos formulados y concertados.

El triste balance que ha dejado el llamado “Macrodesastre” de San José, sumado a la historia de desplazamiento en la Baja Suiza, son dos aprendizajes que, sumados a la voluntad política y al espíritu cívico de los manizaleños, permiten acometer con esperanza la reconstrucción integral de la Comuna San José, implementando un plan integral a largo plazo, concertado con los actores sociales del territorio como proyecto de ciudad para ser gestionado y ejecutarlo con el concurso del Gobierno, la Empresa, el Tercer Sector y la Academia. Pero dado que la magnitud y complejidad del asunto, escapa a cualquier administración y al corto plazo, además de la conformación de un Grupo Motor y de una veeduría calificada, se requiere de un presupuesto, apropiando durante varios años, parte de las regalías, del presupuesto de inversión de Manizales, y de las rentas de las empresas estatales locales y departamentales, pero también de otros recursos de la Nación.

*Profesor Universidad Nacional de Colombia Sede Manizales. http://godues.webs.com Ponencia en Comisión Accidental del Concejo de Manizales. Manizales, marzo 2 de 2022.

Fuentes bibliográficas y de consulta:


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